Para
quienes no tenemos la suerte de tener un taller en el que poder llevar a cabo
nuestros proyectos mecatrónicos y de otra índole, el uso del espacio resulta
algo crítico. A poco que me pongo a montar un kit mecánico, probar circuitos
electrónicos en una placa Protoboard, soldar componentes o usar pinturas y
adhesivos, mi escritorio y mobiliario cercano quedan sepultados por un caos de
objetos.
Desde
un tiempo me ha resultado muy interesante la idea de poder diseñar circuitos
electrónicos en el PC y simular su funcionamiento. No deja de ser un ejemplo, a
escala pequeña, de la revolución que impusieron hace años los programas de
Diseño Asistido por Ordenador (siglas CAD en inglés). Frente a los clásicos
tableros de dibujo, el poder proyectar un producto en 3D y detectar conflictos
entre componentes y equipos en la fase de diseño, no tiene precio. Siempre
pongo como ejemplo el desarrollo del submarino de ataque Virginia. Respecto a
los métodos anteriores, el diseño mediante software CAD en 3D permitió el
trabajo simultaneo de distintos equipos profesionales sobre una misma
"maqueta virtual" a escala 1:1. Así se agilizan procesos de diseño y
se detectan fallos a tiempo. O así debería de ser.
Volviendo
a la cuestión de los circuitos electrónicos, a través de la aplicación Electronics
Lab de Autodesk acabo de conocer Tinkercad. Se trata de una aplicación web para
la creación de proyectos abordando la parte mecánica y electrónica.
Para
el diseño electrónico, Tinkercad me ha encantado. Dispone de un entorno muy
ameno con el que vamos seleccionando los elementos activos y pasivos que
necesitamos, comenzando desde una placa Protoboard. Una vez dispuestos los
elementos y realizadas la conexiones, podemos simular el funcionamiento para
estudiar su comportamiento. Y aquí viene lo mejor. El propio programa nos
asesora sobre lo que acabamos de hacer. Por ejemplo, emite un aviso sobre la
intensidad de corriente que está circulando por un diodo led. Si es superior al
valor conveniente, nos lo indica con números. Y si llegase a ser destructiva
para el diodo, nos lo indica de manera contundente. Además, mientras la
simulación está en marcha podemos ir modificando las variables de cada elemento
y ver los cambios en el momento. También podemos obtener una lista con los
materiales empleados e importarla a nuestro ordenador en un formato compatible
con Excel. O algo tan simple pero cómodo como poder controlar el zoom mediante
la rueda central del ratón. Tengo la sensación de que iré descubriendo más
gratas utilidades a medida que vaya desarrollando mis proyectos con él.
En
cuestión de diseño mecánico me ha gustado, pero no tanto, ya que se encuentra
en la categoría de lo que yo llamo programas "no profesionales". No
es un SolidWorks precisamente. Si bien resulta mucho más sencillo que aquellos
programas de alto nivel, carece de las funcionalidades técnicas que los
caracterizan y que permiten llegar a diseños complejos. No obstante, no debe
ser despreciado por ello. Lo veo muy útil de cara al prototipado rápido y
exportación de modelos para impresoras 3D, entre otros usos.
Acceder
a este programa en la red es gratuito, mas debemos de darnos de alta como
usuarios facilitando nuestro correo electrónico. Creo que es lo menos que se le
debe a Autodesk, cuyo programa estrella AutoCAD ha sido pirateado en masa y sin
compasión durante años. Se aprecia una política corporativa consistente en
regalar antes de que se les robe. Pero algo habrá que darles a cambio.
En resumen, el entorno es
muy atractivo e ideal para quienes se estén iniciando en los entornos CAD. Y lo
que más me importa a mi ahora: poder simular mis circuitos electrónicos y
evaluar sus funcionalidades, para ir a tiro hecho a la hora de liarme a pinchar
cables y componentes en la Protoboard.
No hay comentarios:
Publicar un comentario