miércoles, 29 de febrero de 2012
martes, 28 de febrero de 2012
lunes, 27 de febrero de 2012
Megafactorías: Supermetro
Aunque algunas cosas que se indican como novedosas, ya llevan tiempo funcionando, me parece un buen documental. Se ve perfectamente como suele ser el proceso de construcción y montaje del material rodante ferroviario. Además, queda clara la necesidad de rigor y calidad en la fabricación, ya sea para competir entre empresas o entre naciones.
domingo, 26 de febrero de 2012
jueves, 23 de febrero de 2012
martes, 21 de febrero de 2012
ROBOT ARM II
He continuado con el ensamblaje
de piezas, habiendo cometido dos pequeños errores, sin mayores consecuencias.
El primero de ellos, es no haber separado y clasificado todos los tornillos y
pasadores. De esta manera me hubiese facilitado el proceso de montaje. El
segundo, y derivado del primero, no percatarme de que uno de los pasadores era
más corto que los demás. Me di cuenta de ello cuando ya había montado casi toda
la articulación. Vi que tenía que ir desarmando los órganos motores uno a uno
hasta dar con él, ya que va alojado en la caja de engranajes de la pinza. Por
suerte, lo encontré en la primera articulación que desmonté.
A
medida que he ido avanzando, el resultado ha sido muy satisfactorio. Sobre todo
cuando he ensamblado y montado la pinza. Me recuerda mucho a los colmillos (que
me perdonen y corrijan los biólogos y demás entendidos en invertebrados) de los
insectos.
Espero
seguir trabajando esta tarde y llegar a terminar el brazo.
viernes, 17 de febrero de 2012
ROBOT ARM I
Ayer,
por fin, comencé el montaje de mi brazo robot. La verdad es que las
instrucciones especifican muy bien las operaciones a realizar. La primera de
ellas, soltar las piezas de plástico que han sido inyectadas en un molde y
están unidas por un esqueleto. Aquí, yo he complementado la operación repasando
los apéndices del corte con una cuchilla.
La
primera operación de montaje es componer los órganos motrices. La mayor
dificultad que encontré fue situar las pequeñas tuercas en sus correspondientes
ranuras y mantenerlas en su debida posición hasta juntar las carcasas. Lo que
más me desesperó, un poco, fue la tuerca más próxima al motor, que en cuanto se
movía un poquito, era atraída por los imanes permanentes del estator de éste. Pero
no revistió mayor importancia.
Por
último, tocaba ir a cenar, monté la base del brazo. De momento, el trabajo ha
sido satisfactorio y muy entretenido.
jueves, 16 de febrero de 2012
Sistemas de distribución en las máquinas de vapor
Una de
mis inquietudes respecto a las máquinas
de vapor de cilindros, es conseguir comprender el fundamento de sus sistemas de
distribución. Entiendo para que sirven, pero tengo ganas de comprender sus relaciones
geométricas y mecánicas para poder ser capaz de diseñar uno. Por suerte, parece
que hay bastante documentación al respecto.
martes, 14 de febrero de 2012
lunes, 13 de febrero de 2012
El ferrocarril más extremo del mundo
El desarrollo
de grandes obras civiles no sólo es cuestión de dinero y política. El
enfrentamiento ante la naturaleza, tanto en su carácter orgánico como
inorgánico puede ser insuperable (al menos momentáneamente). Un ejemplo sobre
esto fue el primer intento de construcción del Canal de Panamá, en el que los
equipos técnicos además de padecer continuos derrumbamientos del terreno, sucumbían
ante enfermedades tropicales. Otro ejemplo es el caso de España, en donde el
tardío desarrollo del ferrocarril no se debió sólo a la penuria económica (la
visita de los franceses nos dejó la casa manga por hombro), enfrentamientos
civiles (las tres Guerras Carlistas) y jerarquías políticas ineficientes. La
geografía de la Península Ibérica puso las cosas verdaderamente difíciles.
Basta con ver el conocido caso de la conexión ferroviaria entre León y Asturias
a través del Puerto de pajares o el ferrocarril Córdoba-Belmez.
Tenía
entendido que la reciente línea férrea entre Pekín y Lasha supuso un gran reto
tecnológico, pero no de tanta magnitud.
viernes, 10 de febrero de 2012
Chamartín in the night
Menudo
gustazo acabar los exámenes. He salido de la escuela a eso de las seis y media
con los sesos abrasados. Lo cachondo del asunto, es que tanto desear acabar y
de pronto me he visto sin saber que hacer o para donde tirar. Menos mal que me dio
por llevarme la cámara compacta. Decidí pasar el rato fotografiando trenes.
Primero en Atocha y luego en Chamartín. He pasado frio pero me ha reconfortado.
Para mí, es como ir a pescar.
domingo, 5 de febrero de 2012
Capricho
El otro día, para celebrar mi aprobado en Estadística y
consolarme ante los abatares de la gripe moderada, me hice un autorregalo.
Llevo muchísimos años con ganas de iniciarme en el mundo de la robótica pero
nunca he tenido ocasión. En cambio, ahora siento que soplan nuevos vientos en
mi vida. El estar a punto de acabar la carrera se esta traduciendo en menos
agobio, menos austeridad y un montón de conocimientos y técnicas para resolver
problemas.
El
juguetito que presento, como tal, no es un robot. Me refiero que no cuenta con
automatismos, mas es cierto que es cuestión de ingenio añadírselos. Pero en
cambio, por unos 50 euros, es un kit para montar, con el cual se puede aprender
los principios básicos de la robótica. Estoy deseando que llegue mi último
exámen (el viernes que viene) y tras un poco de respiro y relax, ponerme a
ensamblar piezas.
sábado, 4 de febrero de 2012
Un clásico
Ayer, el tremendo frío y la
ociosidad provocada por el catarro que me ha amargado la vida la última semana,
me hicieron modificar mi paseo matutino, entre el estudio y la comida.
Entonces, la bombillita incandescente, con su baja eficiencia energética, se me
encendió en la cabeza. Me convenía estar resguardado del clima y de paso me
apetecía atender algún asunto pendiente de carácter ferroviario.
Han pasado años desde que se
inauguró la prolongación de la Línea 1 del Metro de Madrid desde Portazgo hasta
Miguel Hernández, siendo presidente de la Comunidad Autónoma de Madrid, don
Joaquín Leguina. A los pocos días me llevo mi padre a conocer el hito
tecnológico y que agradable sorpresa me llevé al descubrir en la estación de
Alto del Arenal, un vehículo clásico del Metro. Claro está, que me hubiese
gustado más verlo funcionando y no estático sobre una estructura. Pero también
es cierto que prefiero verlo así, que no muerto de asco a la intemperie, blanco
fácil de grafiteros y demás descastados sociales o directamente víctima del
soplete.
Desde entonces, siempre tuve pendiente
volver por allí y admirar tranquilamente esta belleza de acero, evocando la de veces que debió de recorrer las entrañas de esta ciudad, en la que se cruzan los caminos. Y de paso, comérmelo
con la cámara de fotos. En fin, más vale tarde que nunca.
Se trata del coche R122
(remolque) del tipo Quevedo. Los primeros vehículos de esta clase entraron en
servicio en 1925. Traían de fábrica enganches automáticos en los dos testeros y
una sola cabina de conducción. Se adquirieron para dar servicio en la Línea 2
con motivo de la ampliación de Sol a Quevedo.
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